Funcionará BAII con los estandares más altos de la «gobernación del siglo XXI»
«He decidido tomar este honorable puesto, comprendiendo que los dirigentes chinos intentan crear una institución de desarrollo multilateral de primera clase con gobernación del siglo XXI», dijo Jin en un evento celebrado por Brookings Institution, un grupo de expertos con sede en Washington.
«No hubiera aceptado este trabajo sin esta condición», anotó Jin, quien cuenta con años de experiencia como funcionario de alto rango en el Banco Mundial y el Banco Asiático de Desarrollo.
En febrero de 2014, Jin fue nombrado por el gobierno chino para encabezar el Equipo de Trabajo para establecer el BAII, que fue en su momento ampliamente puesto en duda por países occidentales, particularmente, Estados Unidos.
Hasta el momento, el banco cuenta con 57 países fundadores, incluidos varios aliados del país norteamericano, y contará con un capital autorizado de 100,000 millones de dólares. El banco tiene previsto comenzar sus operaciones antes de finales de este año.
Jin dijo que la creación del BAII es el resultado de los esfuerzos de todos los futuros miembros fundadores que coincidieron en que la gobernación de la institución debe estar sujeta a «los niveles más altos posibles», combinando las cualidades de los existentes bancos de desarrollo multilateral y de las exitosas empresas del sector privado.
«Cuando se ven hoy los resultados de los esfuerzos de todos los futuros miembros fundadores, un nuevo tipo de banco de desarrollo está tomando forma, un nuevo banco de desarrollo con la gobernación del siglo XXI», dijo Jin.
Jin señaló que con la rigurosa aplicación de la gobernación, el BAII se mantendrá «ajustado, limpio y verde».
Mantenerlo ajustado significa que no habrá puestos redundantes, dijo Jin. «Si se permiten puestos redundantes hoy habrá dos, tres y cuatro. Un vez las redundancias se vuelven masivas, es muy difícil erradicarlas. Por lo tanto tenemos que ser cautelosos para mantenerlo ajustado».
Jin instó a tomar una actitud de «tolerancia cero» hacia la corrupción en el BAII como la que él mismo llevó a cabo con éxito en el Banco Mundial cuando su equipo gestionó aproximadamente 40,000 millones de dólares.
«Bajo mi dirección ni uno solo de los miembros de mi equipo estaba implicado en casos de corrupción. Ni uno de ellos fue puesto en prisión, porque implementé la política anticorrupción. Se trata de la implementación. No es la política en papel lo que importa. Es la mano muy dura. Si tú como jefe estás limpio nadie se atreve a hacerlo. Esta es la clave», dijo Jin.
El BAII disfrutará una «gestión de primera clase» debido a que el banco contará con reclutamiento universal y adquisición universal, una nueva característica del BAII comparada con los existentes bancos de desarrollo multilateral, y la garantía fundamental para su éxito, dijo Jin.
«No rechazamos a ningún ciudadano, aunque sus países no sean miembros. No rechazamos a profesionales de alta categoría solo por sus pasaportes. Tampoco rechazamos a ninguna compañía que ayude a desarrollar la infraestructura solo porque sus países no sean miembros», afirmó Jin.
Al hablar de las relaciones entre el BAII y el Banco Mundial, el Banco Asiático de Desarrollo y otros bancos existentes de desarrollo multilateral, Jin indicó que el BAII no es rival de estos, y cuenta con una colaboración fluida con ellos por el momento.
«Con suerte, el BAII será un impulso para el proceso de reforma en estas instituciones», agregó.
Jin también aseguró que el BAII no ha sido creado exclusivamente para las iniciativas de «la Franja y la Ruta», sino como un banco para cubrir a todos los países asiáticos en desarrollo.
Los equipos de profesionales del BAII se están preparando para el primer grupo de proyectos que podrían lanzarse en el segundo trimestre de 2016, señaló Jin.
Agencias
