Provoca China desindustrialización en América Latina
Buenos Aires Argentina, 10 de nov. de 2015.- Daniel Novegil, presentó hoy en el Congreso Alacero-56 el estudio “Diagnóstico y propuestas para la industrialización de América Latina” que se desarrollaron en 4 países: México, Colombia, Brasil y Argentina, debido a la preocupación en la actividad industrial.
Detalló que la coordinación general de este estudio estuvo a cargo de Germano Mendes de Paula.
El contenido elaborado por México fue de Ernesto Cervera en 2011; José Luis de la Cruz Gallegos en 2012; Salvador Quesada y José Vergara en 2013,
Corregir los precios relativos, proteger a la industria local de la competencia china e impulsar la innovación y la educación son algunos de los principales ejes para una política de desarrollo productiva.
Refirió que estos países de América Latina han sufrido un proceso de desindustrialización.
Mencionó que en el caso de México la industria manufacturera representaba el 21% del PIB en México en el 2011 y en la actualidad representa apenas el 17 por ciento.
Mencionó que en Brasil la caída ha sido mayor ya que de tener la industria una participación del 18% se redujo a solo 9 por ciento.
De acuerdo con el estudio que encargó el presidente de Alacero, Daniel Novegil, a un grupo de economistas liderado por Dante Sica y Bernardo Kosacoff, la consolidación de un polo industrial en los principales países de la región está ligada a un conjunto de iniciativas que, en el caso de la Argentina, está encabezado por una «corrección de los precios relativos» que permita mejorar «la calidad del gasto público, reduciendo la emisión para mejorar el nivel de la paridad cambiaria, las tarifas y la tasa de interés».
El informe también identificó la importancia de estimular la inversión y financiar la producción a través de medidas concretas, como el sistema de ajuste por inflación de los balances de las empresas, la capitalización de las utilidades reinvertidas y el régimen de amortización acelerada. Alertó además sobre la importancia de proteger a las empresas locales de la competencia desleal. Para este objetivo se subrayó la relevancia de aplicar «el herramental disponible en el ámbito de la OMC: medidas antidumping, antisubsidios y aranceles, considerando el impacto de las prácticas de competencia desleal de China, que el próximo año se convertirá en miembro pleno del organismo multilateral».
Resaltó la importancia de «estimular las exportaciones para que las empresas puedan insertarse en mercados externos y sigan creciendo luego de alcanzar determinado nivel de desarrollo» y, a la vez, «hacer más eficiente el mercado laboral a través de una mayor facilidad de incorporación de mano de obra capacitada a los sectores competitivos».
Otro de los puntos que se identificaron como un elementos clave para revertir los procesos de desindustrialización y de primarización de las exportaciones en varios países de la región fue el fomento a la infraestructura y la logística. En este sentido, se priorizó «la adecuación de las principales demandas de rutas, puertos, vías navegables, ferrocarriles y energía para dar competitividad a las actividades productivas».
Por Verónica Flores
