«Brilla la chatarra» como el oro
Mientras que en promedio a nivel global el 71% de la producción de acero se realiza por el proceso de alto horno, el cual es intensivo en el uso de mineral de hierro, la situación en México es totalmente opuesta.
Aproximadamente el 70% de las 18 millones de toneladas que se fabrican anualmente en México utilizan el proceso de horno de arco eléctrico, el cual usa la chatarra como materia prima para la fabricación.
Esto convierte al país en uno de los principales usuarios de este tipo de ruta de producción entre los 15 principales países productores de acero en el mundo. De acuerdo con datos del World Steel Association, solamente Irán con una participación del 85% y Turquía con el 74% superan a México en el uso de este tipo de tecnología para la fabricación de acero.
Con los niveles de producción y la intensidad del uso de chatarra, los productores de acero requieren un abastecimiento de aproximadamente 16 millones de toneladas de chatarra anuales y la demanda en los próximos años aumentará, toda vez que las inversiones realizadas por las empresas mexicanas, como Deacero, Simec, Ternium e incluso AHMSA, con su proyecto Fénix, requerirán mayores volúmenes de esta materia prima para la fabricación de acero.
El abasto de chatarra al mercado mexicano tiene dos fuentes, por un lado México es un importante importador de chatarra. De acuerdo con datos de la Secretaría de Economía, en los últimos 3 años se han importado un promedio anual de 850 mil toneladas de esta materia prima al mercado nacional, siendo Estados Unidos nuestro principal proveedor con un 98% del total importado.
Por otra parte, el país también es un importante exportador de chatarra de acero. En el mismo período de tiempo, los datos de la Secretaría de Economía muestran que el país ha exportado un promedio de 890 mil toneladas de material a destinos tan diversos como Estados Unidos, Indonesia, Taiwán e incluso este año se han agregado nuevos destinos como Perú y Ecuador.
Sin embargo, el mercado de importación abastece al sector siderúrgico de México con una proporción muy limitada de sus requerimientos. Prácticamente 16 millones de toneladas de chatarra deben ser obtenidas de fuentes locales de abastecimiento, por lo que las empresas que utilizan esta materia prima cuentan con enormes extensiones de terreno, conocidos como patios de chatarra, para almacenar sus inventarios de esta materia prima.
Aunque las operaciones comerciales de chatarra en México están asociadas a pequeños centros de acopio y a la informalidad, lo cierto es que es un mercado que genera cada año un valor aproximado de 6,000 millones de dólares según estimaciones de ReportAcero y que seguirá en aumento por las nuevas inversiones realizadas por el sector en el país.
Para ponerlo en contexto, el valor generado por el mercado de chatarra en México es 7% mayor al gasto programable asignado en el proyecto de presupuesto de 2015 a las Secretarías de Economía, Relaciones Exteriores y Hacienda y Crédito Público de manera conjunta.
Aun y cuando el valor de este mercado es importante, no existe los apoyos necesarios para mejorar las condiciones económicas del sector. Como ejemplo de esto es que no obstante el tamaño de mercado potencial que se prevé para los siguientes 5 años, no existe un programa de chatarrización que permita disponer de importantes cantidades de acero contenidas en los vehículos automotores abandonados en los diversos corralones de las autoridades de tránsito a lo largo y ancho del territorio nacional.
Con ello se podría incrementar de manera inmediata la oferta disponible de este insumo y a la vez promover el reciclaje de productos que pueden convertirse en focos de infección.
Staff/Reportacero
