Aplica Colombia salvaguardas al acero mexicano
11 de octubre de 2013.- Tres decretos expedidos esta semana por el Gobierno de Colombia, en los cuales se establecen medidas de salvaguarda ante las importaciones de algunos aceros, entre estos el acero procedente de México, se convierten en objeto de polémica.
Mientras que los productores nacionales venían pidiendo a gritos esas medidas, los importadores señalan que esto elevará los costos de la construcción.
Esto, en momentos en que, en términos generales, la industria del acero atraviesa por una situación difícil. En el 2012, la producción cayó 4,4 por ciento, y este año sigue en terreno negativo, lo cual crea temores sobre el empleo.
LA CONTROVERSIA
El primer decreto tiene que ver con la aplicación de un arancel del 21,29 por ciento al ingreso de seis subpartidas de alambrón, materia prima para el alambre.
Esta medida regirá provisionalmente durante 200 días desde el 7 de octubre, y excluye las importaciones desde Argentina, Chile, Ecuador, EUA y Canadá.
En tanto, también decretó salvaguardas para el alambrón corrugado, cuyo arancel será de 21,96 por ciento y excluye solo a Venezuela.
Como se sabe, el 98 por ciento de las importaciones de este producto proviene de México, Brasil, China, Japón, y Trinidad y Tobago.
Esta petición fue presentada por Acerías Paz del Río, argumentando que la entrada de este producto se duplicó en menos de dos años, tiempo en el que la participación de la industria local cayó del 64 al 33 por ciento.
Ahora, la preocupación está por el lado de los trefiladores, quienes convierten el alambrón en alambre, pues hay temores de que haya una sustitución de importaciones de la materia prima por producto terminado.
En declaraciones recientes a este diario, Óscar Proaño, director de Proalco (uno de los jugadores del sector), dijo que en el país no se producen cantidades suficientes de alambrón y advirtió que las salvaguardias harán más barato importar el producto terminado que fabricarlo en el país.
Por su parte, Óscar Ramírez Acevedo, presidente ejecutivo de la Organización G y J, el mayor importador de acero del país, asegura que las salvaguardias no solucionan el problema estructural del sector. En cambio, afirma que sí pueden encarecer la materia prima para sectores como el de la construcción y el agropecuario, intensivos en el uso de acero y trefilados.
No obstante, cifras del Dane señalan que el peso del acero en los costos directos de la construcción es del 7,9 por ciento, y sobre el total de la obra es del 5,2 por ciento. En ese sentido, un aumento del 10 por ciento en el acero tendrá un impacto del 0,5 por ciento sobre la obra.
Ramírez indicó además que las restricciones impuestas a la importación van en contravía de los compromisos del país en el TLC con México. “Esta es una solución política de corto plazo, que viene a paliar una situación también de corto plazo”, dice.
La polémica no termina ahí. El principal socio de los importadores de acero es la mexicana Deacero, la cual –dicen conocedores del sector– ha sido beneficiada por medidas antidumping (protección cuando hay empresas que venden a precios inferiores a los costos de producción), de manera que con su mercado cerrado puede vender en otros países a menores costos.
Incluso, EUA adelantó investigaciones de dumping a México, cuyo resultado fue la aplicación de una sobretasa del 21 por ciento a las importaciones desde el país azteca.
El dumping también ha sido investigado en Colombia (principalmente de productos provenientes de China), lo cual ha obligado a tomar medidas.
Mientras tanto, el Ministerio de Comercio, adelanta, por solicitud de las empresas del sector, investigaciones sobre otros productos provenientes del acero.
PREOCUPA EL PANORAMA DE LA PRODUCCIÓN DE ACERO LARGO
Mientras que la producción cayó 10% en el semestre, las compras externas aumentaron 23%.
De hecho, el Comité Colombiano de Productores de Acero de la Andi advierte que, “si la situación continúa, a diciembre próximo la participación de la industria nacional se reducirá al 59 por ciento, seis puntos menos que a comienzos del año y 19 menos que en el 2010”. Aparte de las importaciones, los otros problemas que enfrenta el sector son el contrabando técnico, la sobrefacturación y la subfacturación.
Entre tanto, el Mincomercio también adoptó una salvaguardia temporal por 200 días para la importación de barras de hierro o acero, que consiste en un arancel del 25,6 por ciento. Quedaron excluidas las importaciones desde Venezuela, Ecuador, Cuba y Estados Unidos.
