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Otorgarán 16 mil micro créditos de vivienda a productores rurales

26 de junio de 2013.- El Fideicomiso Fondo Nacional de Habitaciones Populares (FONHAPO) y los Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA), firmaron un convenio de colaboración para poner en marcha el programa de Financiamiento a la Vivienda Rural con base en la Actividad Productiva.  Con este esquema, se otorgarán 16 mil microcréditos de vivienda a productores rurales de bajos ingresos, con una inversión total aproximada de mil 800 millones de pesos.

Las viviendas tendrán un valor máximo de 113 mil 200 pesos, indicó un comunicado de FONHAPO.

Los titulares de FONHAPO, Ángel Islava Tamayo, y de FIRA, Rafael Gamboa González, firmaron el convenio, cuyo objetivo es abatir el rezago de casas en el campo, a través de garantizar el otorgamiento de préstamos para autoproducción de vivienda, apoyados con recursos de FIRA y garantizados por el FONHAPO.

Este programa beneficiará a cañeros, pescadores, ganaderos, productores forestales y agricultores en general, quienes perciben ingresos menores a cinco salarios mínimos mensuales, y que actualmente no son atendidos por el sistema financiero.

En el comunicado de FONHAPO se explica que este organismo destinará en una primera etapa, 100 millones de pesos de garantías, que detonarán microcréditos por un monto de mil millones de pesos, otorgados por FIRA.

Los microcréditos serán complementados con 728 millones de pesos de subsidios federales.

Se explicó que el crédito que otorgará FIRA es por el 55 por ciento del valor del inmueble, mientras que el beneficiario cubrirá otro 5 por ciento.

En tanto, la Comisión Nacional de Vivienda (CONAVI) ofrecerá el 40 por ciento restante del valor como subsidio y FONHAPO dará la garantía para el crédito.

Cabe señalar que en las reglas de operación del Programa de Vivienda Rural, publicadas en el Diario Oficial del 28 de febrero de 2013, señala que este programa aplica en tres modalidades de apoyo, ya sea para edificación de una unidad básica de Vivienda Rural (UBVR), así como ampliación y mejoramiento de la vivienda existente.

El Programa va a operar a nivel nacional en las localidades rurales de hasta 5,000 habitantes clasificadas como de Alta o Muy Alta Marginación. Y para ser beneficiario, se le dará prioridad en la entrega de estos subsidios a los hogares de mayor pobreza, a las jefas de familia habitantes en zonas indígenas, madres solteras, familias con alguna persona con discapacidad y adultos mayores.

Sin embargo, los apoyos del programa estarán condicionados a las aportaciones de los gobiernos estatales o municipales, y a que los beneficiarios puedan aportar el 5 por ciento sobre el monto asignado, según indican las reglas de operación.

El titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Jorge Carlos Ramírez Marín, dijo que este esquema de apoyos tendrá una repercusión directa en la economía del país, ya que abre un  inmenso campo de trabajo para los desarrolladores de vivienda, los promotores y productores sociales, los intermediarios financieros.

Ramírez Marín señaló que el programa permite que más ciudadanos transiten hacia la formalidad y exhortó al director de FONHAPO a verificar que los estándares de calidad de las viviendas que se construirán no sean menores a lo que se pide para las construcciones que se edifican con el apoyo de INFONAVIT y FOVISSSTE.

El funcionario federal solicitó al director de FIRA que los esfuerzos que se hagan tengan la flexibilidad necesaria para el medio rural, al que “no podemos pedirle los mismos niveles de cumplimiento que se exigen en el medio urbano”.

Por su parte, Ángel Islava Tamayo, director de FONHAPO, consideró que hasta hoy no existía un esfuerzo institucional relevante para atender a las familias rurales, y ahora de manera conjunta se atenderá a este sector de la población de manera oportuna.

Precisó que se trata de una vivienda digna con al menos 40 metros cuadrados, con dos recámaras, baño, cocina y ecotecnias adecuadas a las necesidades del entorno rural.

Asimismo, el director general de FIRA, Rafael Gamboa González, afirmó que este modelo de atención ofrece un esquema de garantías financieramente sostenibles, lo que contribuye al objetivo de asegurar la solidez y prudencia del sistema financiero.

FONHAPO estimó que en México nueve millones de hogares están en rezago habitacional ampliado, es decir que viven hacinados o sus viviendas están construidas con materiales de baja calidad y duración.

Por Lourdes Flores

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