Nuevo León, un estado con mejor perspectiva

Hiram Peón Lara

Recientemente anunció el gobernador la cifra destinada a inversión en el estado. Entre todos los proyectos que arrancan este año acumula un total de 7 mil 600 millones de pesos.

Esta cifra incluye proyectos viales en carreteras y la ampliación de las líneas cuatro y cinco del metro, la compra de más de quinientos camiones anunciados para ampliar el sistema de transporte público, y la mejora de del servicio de seguridad en el estado, entre otros proyectos.

La cifra supera, por mucho, la ejercida por Jaime Rodríguez, anterior Gobernador, en su último año de gobierno.

Simultáneamente los empresarios siguen anunciando inversiones en distintos rubros lo que mejora la perspectiva en empleo e impulsa la dinámica económica en el estado.

Pero no todo son buenas noticias. La participación federal en el estado luce raquítica, por un lado nos exigen más recursos y por otro se estrangula el flujo de las partidas federales. La amenaza hacia Nuevo León se amplia, se mencionan nuevas caravanas de inmigrantes que se dirigirán al estado.

Ya hemos incorporado a muchos centroamericanos y una masa, agresiva, de haitianos que se han asentado en la ciudad, que algunos de ellos ya tienen empleos, aunque ahora hacen plantones exigiendo más apoyo.

Todas estas personas, los migrantes, han revelado su intención de viajar hacia Estados Unidos, pero por lo pronto son una carga social para la ciudad y para los  precarios servicios que tenemos.

Si a esto le agregamos la escalada de problemas en el área de seguridad, la presencia del crimen organizado exigiendo a las empresas pagar cuotas de seguridad, tendremos un escenario, en este aspecto, bastante difícil para el año.

Sin embargo todavía estamos a la espera de que las autoridades, en materia de seguridad, tomen las medidas adecuadas para detener la escalada de violencia. Todavía tenemos un promedio de diez muertos por día en el estado y no se diga el robo de vehículos.

Creemos, queremos creer, que en este rubro tendremos un cambio drástico y que veremos una disminución importante en la violencia del crimen organizado en el estado.

Veremos en este año más migrantes en nuestras calles, más infectados por la nueva sepa del coronavirus, menos muertos por la pandemia, esperamos una reducción de la violencia del crimen organizado y una mayor pujanza económica.

Probablemente más niños vuelvan a las escuelas en el modo presencial y los maestros se adaptarán, de nuevo, a los modos online y presencial, simultáneamente.

Todo parece indicar que tendremos un buen año 2022, pero no será gratuito. Tendremos que luchar y esforzarnos más para mantener nuestra productividad y crecimiento. Ahora contamos con un gobernador que muestra deseos de llevar a Nuevo León a un mejor estatus. Aunque tendremos que perdonarle sus salidas juveniles y su constante búsqueda de reconocimiento social.

Todo saldrá mejor si nos seguimos esforzando.

Mantengamos la esperanza. Hasta la próxima.

El autor es experto en comunicación corporativa y situaciones de crisis. Cuenta con un MBA del ITESM

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